Hablando un día con ella, me comentó que necesitaba fotografías de yoga y me propuso hacer una sesión, en ese momento no era consciente de la suerte que tuve, Elisabeth es la modelo que todo fotógrafo/a quisiera tener.
El día de la sesión todo fluía, había conexión y este es el resultado.
Me encanta, me queda mucho por aprender, pero en la sala contamos con un verdadero Yogui. Mil gracias Fati lo pasé de lujo y seguro repetiremos.
Un trabajo bien hecho. Las fotos están muy bien. Bien elegido el entorno. Enhorabuena!!!!